Coordina: Otro Hábitat

(Octubre de 2015. La Casa Encendida, Madrid)

En el club de aventureros urbanos, hemos vivido una aventura en la Plaza de Nelson Mandela, que los vecinos siguen conociendo como la plaza de Cabestreros. Los vecinos de la zona nos han contado cómo era esa plaza antes de la reforma, cuando era un solar en el que se juntaban para jugar al balón, charlar o hacer merendolas, y en las fiestas del barrio se hacían juegos. Ahora, unos años después de las obras, los vecinos se quejan de que está muy sucia y les gustaría que fuera más verde. Además, nos dicen que ahora hay gente de muchos países y que cada vez se usa más. Hemos conocido a Candela, una vecina que lleva muchos años viviendo allí, y que ha visto en los últimos años el rápido cambio que ha habido el barrio y la plaza. Así que al final, entre todos, hemos decidido poner un segundo nombre a la plaza: “La plaza de Candela”. ¿Y la próxima aventura, dónde será?

Taller impartido en el entorno de La Casa Encendida de Madrid en el que los niños, a través del juego, aprenderán a mirar de manera diferente y a identificarse con el lugar, desarrollando así su capacidad crítica y de interacción con los demás y con el entorno. 

¿Qué es lo que hace único a este sitio? ¿Por qué nombre lo conocen todos? ¿Se habrá montado siempre aquí la verbena de la fiestas? Observamos el lugar para comprender qué cosas lo hacen distinto a otros y le dan su carácter propio. Buscamos anécdotas e historias a través de sus vecinos. Tratamos de entender qué hay en el imaginario de la gente cuando piensa en este espacio. Reflexionamos sobre cómo la diversidad y particularidad de sus elementos y vivencias hacen de este espacio un lugar significativo en el barrio o en la ciudad.